El destino lo dira todo .

A veces ponerse a pensar y pensar acerca de todo lo que a uno le hace mal, no sirve de nada. Hay que dejar pasar el tiempo, dejar que las cosas se vayan dando como el destino lo quiere, que de a poco mejore todo,  no forzar las cosas que sabemos que pronto no van a poder ocurrir. Podemos desear estar rodeado solo de cosas buenas y lindas, pero no siempre puede ser así y hay que saber que de las cosas feas se aprende y que después de todo lo malo sale el sol.  A veces los caminos que nos da la vida no son lo que uno quiere, ni lo que uno espera. No hay que permitir que las tormentas hagan de nuestra vida algo triste.